La enfermedad de Alzheimer (EA) es la forma más común de demencia. Los síntomas de la EA incluyen pérdida de memoria y deterioro cognitivo leve al inicio, pero a medida que la enfermedad progresa, algunos pacientes sufren demencia grave, lo que finalmente les lleva a la muerte en casos extremos. Según Alzheimer’s Disease International, la demencia afecta a más de 50 millones de personas en todo el mundo, y se estima que una parte significativa de los casos es causada por la EA. A medida que aumenta el envejecimiento de la población, el número de pacientes con EA también aumenta considerablemente.

La EA se caracteriza por placas de amiloide β (Aβ) y ovillos neurofibrilares de proteína tau [ 1 ]. Uno de los dos subtipos de EA, la EA esporádica de inicio tardío, ocurre después de los 65 años de edad. La etiología de esta forma más común de AD no se ha dilucidado por completo, pero la hipótesis amiloide es ampliamente aceptada. De acuerdo con esta teoría, los péptidos neurotóxicos derivados de la proteína precursora de amiloide (APP), típicamente Aβ _1–42 , juegan un papel fundamental en la etiopatología de la EA. Los roedores inyectados por vía intracerebroventricular (icv) con Aβ _1–42 o Aβ _25–35 , la parte más neurotóxica de Aβ _1–42 , se utilizan ampliamente para la investigación fundamental sobre la patología de la EA y para la investigación del desarrollo sobre la prevención y el tratamiento de la EA